La esgrima es un deporte donde la coordinación es muy importante, se ejecutan movimientos rápidos para intentar adelantarse a los pasos que va a dar el adversario. Actualmente, hablamos de esgrima olímpica (conocida como deportiva) y de la esgrima histórica (HEMA). Dos modalidades cuyas diferencias es importante conocer, ya que aunque la esgrima deportiva es la más conocida, la HEMA también se practica hoy en día.
En todas las provincias existe al menos una sala destinada a la esgrima histórica que se practica con las mismas condiciones que la deportiva, aunque con algunos cambios. Por ejemplo, la esgrima deportiva goza de unos criterios unificados y unas reglas específicas que le sirven para participar en competiciones y asistir a los Juegos Olímpicos. Conviene, por tanto, profundizar un poco más en cada tipo de esgrima.
La esgrima histórica estudia las fuentes originales
Cuando uno practica esgrima histórica se sorprende de la gran cantidad de documentos antiguos elaborados por maestros de la esgrima que va a poder tener entre sus manos. Esto no es algo que se aprenda en la esgrima deportiva. Existen verdaderos maestros diestros en esta práctica como Jerónimo Sánchez de Carranza y su discípulo Luis Pacheco de Narváez que siguió sus pasos.
Estos dos nombres fueron los más conocidos y nombrados en el siglo XVI. De hecho, existen dos tratados que todo practicante de la HEMA debe conocer. El primero es Las grandezas de la espada de Pacheco y el segundo Filosofía de las armas de Carranza. Ambos dotaron a la esgrima de unos contenidos científicos para conseguir que la destreza se convirtiera en arte a través de su estudio y aplicación.
Si bien la esgrima histórica se rige mucho por el estudio de las fuentes y el rigor, la esgrima olímpica o deportiva supone una modernización de todo esto. Se aleja bastante de las fuentes para centrarse en establecer una normativa, reglas y unificación de criterios que sirvan para las competiciones. Por tanto, ambos tipos de esgrima han evolucionado tomando caminos diferentes.
En la esgrima deportiva hay menos variedad de armas que en la HEMA
En la esgrima deportiva se utilizan tres tipos de armas: la espada, el sable y el florete. Con la espada se puede tocar cualquier parte del cuerpo durante el combate, es algo pesada y cuenta con una guarnición que protege la mano. En el caso del sable, las únicas partes del cuerpo válidas para el ataque son el torso, los brazos y la cabeza. Esto cambia con el florete, solo el torso y la barbilla. Este es el arma más básica de la esgrima.
Con respecto a la esgrima histórica, las armas empleadas son las de la época. Así tenemos las espadas romanas, las medievales de una mano o las roperas del siglo XVII. Sin embargo, se fue adaptando a cada época y, por tanto, son muchas las armas que pueden verse cuando hay un combate de HEMA. Esta es una diferencia muy clara entre una y otra práctica, la cual es interesante tenerla presente.
Las armas en la HEMA estaban destinadas para el combate
Las armas de la esgrima histórica estaban pensadas para el combate, algo que no sucede en la esgrima deportiva porque desde un principio estas se han elegido para una disciplina deportiva, no para un combate medieval. A pesar de esto, en la HEMA hay unas normas estrictas y unas protecciones que se deben llevar en el cuerpo que impiden que puedan causar algún tipo de daño.
Algo muy interesante es que todas las armas, tanto las de la esgrima histórica como las de la deportiva, se curvan. Es verdad que el florete lo hace con una mayor facilidad, debido a su delgadez y flexibilidad. No obstante, todas las armas disfrutan de ese templado y revenido de la hoja que permite la curvatura que impide que hagan daño. Aunque, una espada o sable que toque un lugar no permitido puede provocar dolor.
El atuendo es estricto para la práctica de la esgrima deportiva
Otra de las diferencias entre la esgrima histórica y la esgrima deportiva se encuentra en la ropa. En la HEMA no hay normas estrictas sobre lo que deben llevar quienes practican este deporte, aunque este debería estar en consonancia con el que se llevaba en la época. Por ejemplo, el uso de armas romanas requería de protecciones metálicas. En cambio, con espadas roperas el uso de una chaquetilla forrada es fundamental.
El rigor a la hora de vestir en la esgrima histórica es algo que se cuida bastante. No obstante, en la esgrima deportiva sí hay unas normas estrictas que nada tienen que ver con el rigor histórico. En estos casos la chaquetilla blanca, el pantalón bombacho negro, las medias hasta las rodillas y el calzado oscuro son algunos de los requisitos. También están los guantes y la careta, algo en lo que se diferencia de la HEMA.
Tanto la esgrima histórica como la esgrima deportiva han evolucionado de manera distinta. Mientras la esgrima histórica sigue manteniendo ese rigor que tenía antaño en combate, la esgrima deportiva es más de sala y sus normas y reglas están especialmente diseñadas para competir. En Mariano Zamorano hemos querido darle la visibilidad que ambas disciplinas se merecen y que es interesante conocer.